Ambas entidades deberán sentarse y llegar a un acuerdo sobre las fechas en la División de Honor 24-25. En caso de no entenderse sería el propio CSD en encargado de establecer las jornadas de competición
Jornadas de comunicados, resoluciones y asamblea. La próxima edición de la Liga Plenitude aún no cuenta con fechas oficiales tras la celebración este sábado de la Asamblea General de la Real Federación Española de Balonmano. El motivo el permanente desencuentro entre ASOBAL y RFEBM.
El Palacio de Exposiciones y Congresos de Santander acordaba en la mañana de este sábado la “voluntad de negociar para que se llegue a un acuerdo para la máxima competición masculina española de balonmano por el bien del deporte” en palabras del propio presidente de RFEBM, Francisco Blázquez, como apunta rfebm.com.
Por su parte, ASOBAL, un día antes emitía un comunicado haciendo referencia a la resolución del CSD en la que la propia ASOBAL “presionaba” para que el CSD intervenga “cerrando así un procedimiento abierto desde el 1 de agosto de 2023” con RFEBM al tiempo que “impide al ente federativo poder resolver o intervenir de forma unilateral en materia que afecte a ASOBAL y a la disputa de la Liga Plenitude”.
Con todo, ASOBAL y RFEBM deberán sentarse a negociar y presentar propuestas en el plazo de 10 días hábiles a la resolución del CSD con fecha de 13 de junio. De persistir el desacuerdo entre las partes, “el propio CSD dictará resolución en la que se incluirá la regulación de los aspectos necesarios para el inicio y desarrollo de la Liga Profesional ASOBAL”, dicta la resolución hecha pública por el Consejo Superior de Deportes.
Así pues, el Tubos Villa de Aranda desconoce aún las fechas en las que comenzará su nueva aventura en la Liga Plenitude. En un principio, la idea que sobrevuela en el ámbito del balonmano español es la de comenzar el primer fin de semana de septiembre. Voluntad y dato oficioso.